Escolares y adolescentes en México consumen más azúcar de la recomendada: Ensanut

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CDMX.- En nuestro país, el 67.1% de la población escolar (5-11 años) y el 64.7% de las y los adolescentes (12-19 años) consumen al día más azucares añadidos de los recomendados internacionalmente, de acuerdo con el análisis de las rondas 2020-2023 de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut).

Los resultados fueron publicados recientemente en el número especial de la revista Salud Pública de México sobre la Ensanut. Estos muestran que arriba de la mitad de la población escolar y adolescente está ingiriendo más del 10% de la energía (calorías) de su dieta diaria a través de azúcares añadidos, superando la recomendación internacional estancia por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

De acuerdo con los datos de la Ensanut, se estima que el consumo de azúcar representa el 21.9% de la ingesta de energía diaria.

Estos los niveles de consumo de azúcar no son nuevos, tan solo en el año 2012 la Ensanut había dado cuenta de que el 58% de los niños y 66%  de las niñas de edad escolar consumían más azúcares añadidos de lo recomendado.

Asimismo, el consumo excesivo de azúcares representa un riesgo para la salud actual y futura de las infancias y adolescencia, ya que la evidencia ha demostrado una asociación entre la ingesta excesiva de azúcares y una menor calidad de la dieta, así como el desarrollo del sobrepeso, obesidad y diabetes en la edad adulta.

Causas de la obesidad

Algunas de las principales causas de la obesidad y sobrepeso en niñas y niños se encuentran en el consumo de alimentos procesados con altos niveles de sodio, azúcares y grasas saturadas y trans; así como el consumo de bebidas azucaradas y refrescos, debido a su fácil acceso, su amplia distribución, su bajo costo y su promoción en medios masivos y redes sociales.

El sobrepeso y la obesidad son los principales factores de riesgo de enfermedades no transmisibles; en etapas tempranas se asocia con problemas como síndrome metabólico, hígado graso, problemas posturales, apnea del sueño, enfermedades cardiovasculares, hipertensión, dislipidemias, diabetes tipo II y algunos tipos de cáncer, además de generar baja autoestima y aislamiento social.

Ante este panorama, el Instituto Nacional de Salud Pública considera que es indispensable fortalecer la regulación de la publicidad de productos ultraprocesados, promover etiquetado claro y comprensible; la promoción de entornos escolares saludables, la promoción de educación física, la implementación de políticas que hagan más accesibles los alimentos saludables y la educación nutricional tanto para padres, cuidadores y para las mismas infancias.

Los productos ultraprocesados desplazan ingesta de alimentos saludables: INSP

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